Reuters
Donald Trump afirmó que la cancelación de la reunión con Kim Jong-un supone "un gran retroceso para Corea del Norte y para el mundo", pero no cerró la puerta a las conversaciones para concretar un encuentro con el dictador norcoreano.
El mandatario hizo también hincapié en la capacidad de las Fuerzas Armadas estadounidenses. "Hablé con Jim Mattis y el personal del Ejército, que es por lejos el más poderoso del mundo y está listo si es necesario", afirmó desde la Casa Blanca.
En esa línea, agregó que está en coordinación con los gobiernos de Corea del Sur y Japón. "No solo están listos si Corea del Norte toma acciones irresponsables o tontas, también están dispuesto a compartir los costos económicos de operaciones de los Estados Unidos si hubiese tal situación desafortunada".