Ello supone un aumento de 44% con respecto al mismo periodo (de enero a septiembre) de 2017, cuando el retorno fue de 102,019 personas, destacó Deutsche Welle.
En 2018, 50.9% (74,808 migrantes) abandonaron México; 48.9% (71,886) EEUU y los restantes 188 personas estaban en lugares no identificados.
La gran mayoría (85.3% equivalente a 109,878 migrantes) son hombres adultos. Se contaron además 18,962 mujeres adultas y 18,042 menores de edad.
En particular Guatemala experimentó un crecimiento de 54.8% respecto a 2017, pasando de 45,791 a 70,907 personas que retornaron; y Honduras mostró un aumento de 61.4%, pasando de 35,327 a 57,035.
El Salvador es el único de los tres países que ha experimentado una reducción de retornados, en este caso una caída de 9.4%, al pasar de 20,901 personas en 2017 a 18,940 este año.
Mientras tanto, se multiplican las quejas por el hacinamiento en las instalaciones que acogen en Tijuana (México) a los migrantes de la caravana que pretende entrar en EEUU.
En el albergue instalado en la unidad deportiva Benito Juárez de la ciudad, preparadas para acoger a dos mil migrantes, las autoridades municipales dijeron que en su último registro había 6,062 personas: 516 niñas, 542 niños, 1,127 mujeres y 3,877 hombres.
Esa situación fue señalada como un potencial “foco rojo” por autoridades sanitarias ya que podrían propiciar enfermedades respiratorias, intoxicaciones y contaminación de los alimentos.
El alcalde de Tijuana, Juan Manuel Gastélum, ha asegurado que atender a los migrantes le cuesta cada día al municipio unos $24,600 dólares.
@eldiariony