El muerto es Raúl Rojas, de 30 años, quien supuestamente recibió a tiros a varias patrullas que intentaron apresarlo y cuyos agentes repelieron el ataque.
La Policía fue alertada del secuestro a través de una llamada telefónica de un ciudadano.
Los nombres de las personas que eran mantenidas en cautiverio no fueron revelados de inmediato.
Las víctimas contaron que Rojas solo les decía que le venían siguiendo.
Trascendió que Raúl Rojas y sus víctimas son parientes.
El cadáver fue enviado al Instituto Nacional de Ciencias Forense (INACIF).