Considerando esta particularidad, los científicos de la Universidad de Louisville, en Kentucky, están probando un medicamento experimental contra el cáncer que podría detener la infección por coronavirus. El equipo señala que el fármaco podría evitar que el virus se replique y se propague por todo el cuerpo.
De acuerdo con un comunicado de esa institución, el medicamento es una pieza de ADN sintético llamada “aptámero”. Se une a una proteína de las células llamada nucleolina, que varios tipos de cáncer y el mismo coronavirus, “secuestran” para replicarse.
El fármaco, descubierto por los doctores Paula Bates, John Trent y Don Miller, ha sido probado de diversas maneras, pero “especialmente como un posible fármaco terapéutico contra múltiples tipos de cáncer”, en asociación con el investigador Kenneth Palmer, director del Centro de Medicina Predictiva para Biodefensa y Enfermedades Infecciosas Emergentes (CPM, por sus siglas en inglés).
Ante la emergencia de salud mundial, este equipo de la Universidad de Louisville decidió probar el aptámero en células del coronavirus con buenos resultados. Sin embargo, se encuentra a la espera de la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para comenzar los tratamientos en pacientes graves de COVID-19.
El CPM alberga el Laboratorio de Biocontención Regional de la Universidad de Louisville, el único en Kentucky, que realiza investigaciones con agentes infecciosos en instalaciones de Nivel 3 de Bioseguridad. Según el comunicado, estas instalaciones son “estrictamente seguras y protegen a los investigadores y al público de la exposición a los patógenos que se investigan”.
@eldiariony