Las autoridades sanitarias federales de EEUU atribuyen las muertes al COVID-19 solo cuando los pacientes dieron previamente positivo en las pruebas diagnósticas del virus.
Con ello, en la Gran Manzana aumentó en más de 3,700 las muertes atribuidas formalmente a la enfermedad desde el 11 de marzo, porque en el listado del Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York se habla de “muertes confirmadas y probables por COVID-19”
Exactamente sumaron hasta el martes 10,367 las muertes en la ciudad, casi un tercio del total de más de 28,300 en todo el país, que reporta además más de 600 mil personas infectadas.