La cadena de cines británica Vue admitió este martes ante una corte dos infracciones de salud y seguridad después de que un cliente perdiera la vida al ser aplastado por una butaca en una sala de la ciudad de Birmingham en marzo de 2018, recogen medios locales.
Durante una audiencia sostenida por la Corte de la Corona de Birmingham, la empresa aceptó los cargos por no garantizar la seguridad de sus clientes, así como por no realizar una evaluación de riesgos adecuada en cuanto al uso de asientos de cine motorizados.
De acuerdo a los reportes, Ateeq Rafiq murió a consecuencia de las "catastróficas" lesiones que sufrió cuando su cabeza y cuello quedaron atrapados debajo de una butaca mecánica mientras buscaba sus llaves y su teléfono, los cuales creyó se habían caído al piso al reclinar el asiento.
Al darse cuenta de lo ocurrido, la esposa de la víctima, Ayesha Sardar, intentó auxiliar a su pareja sin éxito alguno, por lo que pidió ayuda al personal del cine. Sin embargo, estos no pudieron liberarlo hasta después de 10 o 15 minutos de intentos.
Los cuerpos de emergencia que atendieron al llamado trasladaron al joven de 24 años a un nosocomio local, en donde perdió la vida por una lesión cerebral hipóxica causada por la falta de oxigenación del órgano durante un largo periodo de tiempo.
Tras investigar el accidente, las autoridades determinaron que al asiento le faltaba una barra de seguridad, la cual hubiera permitido liberar a la víctima del asiento de forma manual. "Si el asiento se hubiera instalado y mantenido de forma correcta, el Sr. Rafiq no habría muerto", declaró en su momento Emma Brown, quien investiga el caso.
Una vez la compañía aceptó su responsabilidad en los cargos, la sentencia definitiva será dictada el próximo 20 de julio.
AP
