Por Bienvenido Rojas
Robinson Canó, tiene 39 años y 140 días, donde el parámetro normal es que los peloteros se retiren cuando llegan a la curva de los 40 años, porque comienza el declive de sus habilidades, sobre todo como es perder los reflejos.
¿Le llegó a Canó la curva del retiro?
Desde mi óptica sí y creo que su paso por el agitado mundo del jet-set le hizo mucho daño. Recuerdo cuando en el 2013, Canó subió fotos suyas en Londres, París y Roma, con su agente, el rapero Jay-Z que lo invitó a un concierto en Amberes, Bélgica, y tras la fiesta compartió en una actividad privada donde se brindó champaña en botellas adornadas con cadenas de oro.
Los Mets lo colocaron en asignación, en buen dominicano le dieron de baja y vamos a esperar si algún equipo se abona con esta quiniela por el resto de la temporada donde restan por pagarle US$ 45 millones.
Es cierto que el béisbol permite que jugadores arriba de los 40 años de edad todavía se desenvuelvan con cierta efectividad, pero no son muchos casos y generalmente se trata de lanzadores, una posición con menos ajetreos que la de un bateador.
El 3 de diciembre de 2018, los Mets y los Marineros acordaron enviar a Canó a los Mets por jugadores y prospectos de Grandes Ligas. El trato completo: los Mets reciben al IF Robinson Canó y el PD Edwin Díaz. Los Marineros reciben a OF Jay Bruce, PD Anthony Swarzak, PD Gerson Bautista y los prospectos Jarred Kelenic y Justin Dunn.
La permanencia de Canó en los Mets no fue productiva. Fue una estadía llena de acontecimientos para el segunda base. Después de la ineficacia, Canó disfrutó de un renacimiento en el 2021 antes de recibir su segunda suspensión por PED, drogas para mejorar el rendimiento. Un golpe fulminante, demoledor.
Cuando el equipo designó a Robinson para asignación el lunes, estaba bateando por debajo de la Línea Mendoza:195/.233/.268 en 12 juegos. Ahora, el equipo de Flushing tiró por el desagüe lo último de la carrera de Canó en los Mets.
Vamos a esperar el tiempo estipulado, pero no veo claro que Canó pueda lograr un enganche como titular, sobre todo, porque la MLB lo mantendrá todo el tiempo en el microscopio y eso no lo aguanta nadie.