sábado, 17 de septiembre de 2022

…Y habló en voz alta

 


Bien. Dada la gravedad casi extrema de las cosas, Luis Abinader fue a la OEA sin un discurso ñe ñe ñe de vacuas complacencias diplomáticas. Muy bien. Dado el gran peligro inmediato que es Haití para nuestro país, Luis habló alto y tendido, y en tono de merecido enojo, ante una “comunidad internacional” (valen las comillas) que evidencia gran irresponsabilidad ante la virtual disolución criminal del país vecino, cargándonos de tantas aprehensiones. Requetebién…(Yo no sé si ha sucedido antes, pero creo que hicieron falta un “coño” y un “carajo”, en tono bien alto, para ver si se espabilan).