Sidney Holmes, de 57 años, fue liberado este lunes tras pasar más de 34 años entre rejas por un robo a mano armada que nunca cometió, ocurrido en el condado de Broward, en Miami (Florida, EE.UU.), recogen medios locales.
Holmes, quien fue condenado en 1989 a 400 años de prisión, quedó libre al dirimirse una solicitud de la Unidad de Revisión de Condenas de la oficina del fiscal del condado, a la cual contactó en noviembre de 2020 alegando que era inocente del robo a dos personas en 1988 que le habían imputado. Había sido acusado de ser el conductor del vehículo en el que se transportaban dos hombres no identificados que asaltaron a una mujer y un hombre y le robaron el auto a este último.
Tras una nueva investigación, la Unidad de Revisión de Condenas, en colaboración con el Proyecto Inocencia de Florida, pudo determinar que el hombre tenía una alegato de inocencia plausible, por la manera en que se convirtió en sospechoso y la precaria identificación de los testigos presenciales, que se usó como principal evidencia en su contra en el juicio inicial.
Así, se determinó que los señalamientos contra Holmes por parte de testigos oculares fueron "probablemente una identificación errónea", como consecuencia de las prácticas de alineación de fotos y en vivo utilizadas en ese entonces por las fuerzas del orden público. Además, se determinó que posiblemente se trató de una identificación errónea del vehículo, dado que no se consideraron las similitudes entre el Oldsmobile de Holmes y el auto usado por los ladrones.
Finalmente, un juez de circuito de Broward, Edward Merrigan, firmó una orden en la que aprobó anular la sentencia del hombre.
"Es surrealista. Nunca perdí la esperanza. Sabía que este día llegaría tarde o temprano y hoy es el día", expresó Holmes. "No puedo ponerlo en palabras, es abrumador. No puedo tener odio, solo tengo que seguir adelante", agregó.
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