@fermartinezm
La Ciudad de Nueva York sigue dando pasos en la complicada carrera que significa “liberar” a las calles del infernal tránsito vehicular, los tapones, el caos y en consecuencia la contaminación ambiental.
Y en esta vía, el Departamento de Transporte (DOT) además de la modernización de algunos nudos y la construcción de más carriles protegidos para bicicletas, anuncia la primera expansión del programa vehículos compartidos (‘Carsharing’), que incluye 270 nuevos espacios en El Bronx, Brooklyn, Queens y Manhattan.
Las nuevas instalaciones comenzaron esta semana y continuarán hasta la próxima, elevando a 552 el total de estos espacios en las aceras y ‘parking’ dedicados al uso compartido de automóviles.
Estos servicios de ‘carsharing’ permiten a las personas acceder a vehículos rentados a corto plazo, generalmente por parte de un día o incluso una hora. Obviamente, el arrendatario paga menos de lo que pagaría con una empresa de alquiler de automóviles.
A través de una aplicación de un teléfono inteligente se reserva el automóvil, se abordan en los estacionamientos y luego se devuelven al mismo lugar reservado. Estos lugares están debidamente señalizados por la Ciudad con letreros que dicen: “Sólo estacionamiento compartido”.
En este momento la Ciudad creó una alianza con tres empresas que ofrecen este servicio: Zipcar, Getaround y Truqit.
Por supuesto, para alquilar estos carros el usuario requiere licencia de conducir vigente y una tarjeta de crédito.
“Esta es una forma comprobada de reducir los gases del efecto invernadero y eliminar más vehículos de nuestras calles. Duplicar el tamaño de este programa lo hará más accesible en más vecindarios y ahorrará dinero a las personas”, dijo el comisionado del DOT, Ydanis Rodríguez.
El resultado final, al menos en la teoría, es que a futuro existirán menos automóviles en las calles, un uso más eficiente de cada unidad vehícular y menos espacios de estacionamiento necesarios.