La nación está cansada de la forma en que se hace política y se percibe un colectivo agotado, abatido de tantas mentiras y sin esperanza de que sus principales problemas se puedan resolver a corto plazo.
La pregunta que todos nos hacemos es la siguiente: ¿que partido político está en capacidad de dar una respuesta satisfactoria a las exigencias de la población?
Por supuesto, que una contestación correcta de cualquier ciudadano que se respete y le duela su prójimo, es la palabra ninguno.
Sencillamente porque las principales organizaciones que han gobernado los destinos de la República Dominicana no han sacado adelante al país, pero si muchos de ellos se han enrriquecido ilícitamente y han cometido prevaricación en perjuicio del pueblo, y por eso la gente cada día es más pobre y los ricos más ricos, y así no se puede construir el progreso de un Estado.
Mucha gente coincide en que es tiempo de preparar a gente para una nueva forma de hacer política, distinta a lo que hemos visto por tantos años , una nueva alternativa que verdaderamente le importe las masas, que haga cosas distintas a lo que tradicionalmente a actuado supuestamente para ayudarnos a vivir de cara a una vida digna pero lo que han hecho es hacernos la vida miserable, paupérrima e indigente.
Este es un pueblo de personas muy valiosas, y haciendo uso de nuestros derechos debemos propiciar un clima y un escenario en que se nos respete en todos los sentidos, nunca es tarde para empezar.
No es posible tanta pobreza sin una respuesta que se corresponda como debe ser a la hora de repartir las riquezas que Dios nos a dado como sus hijos que somos.
Los años vienen y van sin mayores consecuencias, siempre lo mismo, "quítate tú pa'ponerme yo", entretanto la miseria, el hambre, la vida sin esperanza, el desconsuelo, el desmoronamiento de la calidad de la existencia, aprisionan a la gran mayoría que ven pasar el tiempo como cuando el niño pobre pasa frente al juguete caro que solo se conforma con mirarlo porque no lo puede comprar.
Que Dios nos ayude a que un día podamos ver un nuevo amanecer de la esperanza que albergamos de tener ministros y autoridades que verdaderamente le duela la gente de esta sociedad, porque las que nos han gobernados han vivido comiendo con sus damas y se han olvidado que hay otros jugadores en el terreno.
Pastor Antonio Regalado
Congregación Maranatha, Inc.
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