Las casas y otras edificaciones del estilo arquitectónico Victoriano de Santiago, están siendo destruidas sin ningún tipo de contemplación borrando así la memoria histórica de la ciudad y en su lugar construyendo bares y parqueos públicos en base a ranchetas regularmente de estilo típico.
El centro histórico y las calles de diversos puntos de la ciudad son afectadas con las devastaciones de las impresionantes viviendas con estilo victoriano del siglo XVIII y XIX.