Hoy, mi puertoplateñidad espiritual pregunta: ¿Qué esperan los puertoplateños para demandar que la tierra donde fue acuñado el más ilustre de los suyos; donde edificó su más trascendente sueño; donde sentó el ejemplo de entrega total a las más elevadas aspiraciones de este pueblo? ¿Qué espera el país para honrar en grande a quien protagonizó las guerras populares que impidieron la entrega de la República a dos imperios? ¿Qué esperan (qué esperamos) para hacer que la provincia Puerto Plata (que no su municipio cabecera) tenga como nombre “Luperón”?
Por Ramón Colombo