De acuerdo con estadísticas del Departamento de Estado, entre 6% y 10% de las drogas provenientes de Sudamérica que llegan al mercado estadounidense pasan por el Caribe, en su mayoría por la isla La Española conformada por República Dominicana y Haití.
Esa cantidad puede incrementarse, ya que el combate al narcotráfico en México y Centroamérica obliga a los cárteles a retomar rutas en el Caribe, comentó el jefe del área de Asuntos Antinarcóticos del Departamento de Estado.
Los eventuales centros de capacitación, cuya sede aún no está definida, forman parte de la Iniciativa de Seguridad de la Cuenca del Caribe (CBSI, por su sigla en inglés) en la que el gobierno de Estados Unidos ha invertido unos 130 millones de dólares desde el 2010 para contribuir en la lucha contra las drogas.