El sector turístico, el comercial y el empresarial manifestaron ayer que tienen serias preocupaciones con el tema de la inseguridad en la República Dominicana y razones hay suficientes.Los casos más recientes, sumados a otros que se pueden contar con números altos, han dejado en evidencia que la imagen del país pudiera afectarse, alejar a los turistas, provocar el cierre de establecimientos comerciales o al menos mermar la afluencia de clientes, sin importar la hora; romper con la tranquilidad humana y alejar las inversiones.
La Asociación Nacional de Hoteles y Turismo de República Dominicana (Asonahores), la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) y la Confederación del Comercio de Provisiones y Pymes de la República Dominicana (Confecomercio), son solo algunas de las instituciones que últimamente han mostrado alarma por una escalada de hechos delictivos que parece no tener fin ni límites, tomando en cuenta que los malhechores no respetan clases sociales, ni profesiones, templos católicos, carreteras, avenidas, carros públicos, guaguas, y no les importa si se trata de un restaurante, una farmacia, una banca de apuesta, un parque de diversión o una estación de gasolina. En cualquiera de esos puntos se aparecen y pistola en mano despojan a todo el que encuentran y en el peor de los casos le arrancan la vida.
El vicepresidente ejecutivo de la Asonahores, Arturo Villanueva, resaltó la designación de un nuevo jefe de la Policía Nacional y los cambios realizados en algunos departamentos de esa institución, pero dijo que eso debe continuar con el inicio formal de la transformación de ese cuerpo para que sea más efectiva la labor que realiza. Villanueva aseguró que la delincuencia ataca con más fuerza a las ciudades de Santo Domingo y Santiago y que “gracias a Dios no ha sido así en los polos turísticos del país”.
“El proceso de transformación de la seguridad turística se lleva a cabo con mucho éxito, convirtiendo lo que era la Policía Turística, en Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (CESTUR), ahora dependiente del Ministerio de Defensa, con mayor cantidad de recursos y hombres mejor preparados para garantizar al sector turístico su plena seguridad en las áreas turísticas”, expuso Villanueva, en conversación con este diario.
“El Gobierno no solo debe cambiar los mandos, sino cumplir con el proceso de transformación que se inició en la Policía Nacional”, apuntó. Y advirtió que el problema de los actos que se cometen en sitios públicos y de dominio público radica en que eso pudiera presentar una imagen del país inseguro que afecta todo el territorio nacional. “El que está fuera no piensa que es en una u otra esquina que se cometen los acciones sino en todo el territorio de la República Dominicana”, expuso.
Mientras, la ANJE solicitó a las autoridades reforzar las medidas para garantizar la seguridad de la gente. La presidenta de la organización, Biviana Riveiro, no esconde la preocupación por el tema. Y reforzando sus planteamientos dice que el reporte de competitividad Global del Foro Económico Mundial 2015 indica que uno de los factores más problemáticos para negociar en República Dominicana son los crímenes y robos.
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