Otros, más atentos, recordaron el choque del bombardero militar B–25 Mitchell contra el piso 79 de su célebre Empire State Building, el sábado 28 de julio de 1945. Recuerdo doblemente sombrío: la Segunda Guerra Mundial había terminado menos de tres meses antes, el 7 de mayo, con la rendición de Alemania, y esa escena repetía las cientos o miles iguales o peores conocidas desde 1939.
Pero las hipótesis duraron poco: apenas 18 minutos después, un Boeing idéntico y de la misma compañía impactó entre las plantas 77 a 85 de la Torre Sur. Los dos aviones debían cumplir el mismo trayecto (Boston–Los Ángeles), pero fueron desviados por terroristas de Al–Qaeda, la organización regida por Osama Bin Laden.
Entre pasajeros y tripulantes, en ambos murió un total de 157 almas. Sin embargo, fue apenas el comienzo de la mayor tragedia norteamericana aire–tierra desde el bombardeo japonés a la base naval de Pearl Harbor, Hawaii: 2.403 muertos y 1.178 heridos. Bajas superadas por la destrucción de las Torres Gemelas: 2.823 muertos y 6.000 heridos.
Muertos: 2.823. Heridos: 6.000. Por cada mujer murieron 3 hombres. Promedio de edad de los muertos: entre 35 y 39 años. Tempertura que alcanzó el fuego: 1.260 grados.
Tiempo que tardó el fuego en apagarse totalmente: 69 días.
Partes de cadáveres hallados: 19.500. Cuerpos intactos: 291. Víctimas identificadas: 1.216. Niños huérfanos después del atentado: 1.300.
Bebés que nacieron de mujeres cuyos maridos murieron ese día: 17. Crecimiento de alcohol y cigarrillos: 25 y 10 por ciento, en ese orden. Familias que no recibieron restos de los cuerpos: 1.717.
Estrés post–traumático en Manhattan: 200 por ciento, incluidos más de 10.000 alumnos de escuelas públicas.
Toneladas de escombros removidas: 1.506.124. Comienzo del bombardeo de los Estados Unidos a Afganistán, entonces posible refugio de Bin Laden: 26 días.
Pérdida económica de Nueva York: 105.000.000.000 de dólares.
Pagado por las empresas de seguros: 40.200.000.000 de dólares.
Dinero a cada persona que perdió a su cónyuge: 1.000.000 de dólares.
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