Tyson Fury, en tratamiento por depresión y tras dar positivo por cocaína en dos pruebas de drogas al azar el mes pasado, dejó vacante su título mundial de peso pesado la noche del miércoles.
Fury, que admitió que ha consumido fuertemente cocaína y alcohol en los últimos meses, dijo que dejó vacante el cinturón para concentrarse en su tratamiento.
El boxeador se anotó una sorpresiva victoria en noviembre pasado cuando superó al campeón mundial por largos años Wladimir Klitschko para ganar el título, pero fue incapaz de manejar las presiones que iban junto con ser repentinamente el centro de atención. Primero se retiró de una revancha alegando una lesión de tobillo en julio, pero más tarde dijo que la verdadera razón era porque había dejado de entrenar para usar drogas.
Más tarde, el 29 de octubre también fue desechado porque alegó que tenía problemas de salud mental y todavía estaba tomando y usando drogas.
"Creo que es lo justo y lo correcto y por el bien del boxeo el mantener los títulos activos y permitir que los otros contendientes para luchar por los cinturones vacantes que con orgullo he ganado y mantuve como el campeón invicto peso pesado del mundo, cuando derroté a la campeón Wladimir Klitschko", dijo Fury en un comunicado.
"He ganado los títulos en el cuadrilátero y yo creo que ellos deben perderse en el ring, pero soy incapaz de defenderlos en este momento y he tomado la decisión difícil y emocional de dejar vacantes ahora de manera oficial mis preciados títulos mundiales y desear a los principales contendientes todo lo mejor ya que ahora entro otro gran reto en mi vida el cual sé, al igual que contra Klitschko, voy a vencer".
FUENTE: Dan Rafael, analista de boxeo de ESPN
