La mamá, María Josefa Pingo, le contó a Univision Noticias que ya no sabía qué hacer. El río cercano su pueblo Los Pocitos, en el norte del país, se había desbordado tras las intensas lluvias que no cesaban y lo habían dejado aislado desde hacía varios días.
“Felizmente teníamos algo de comida y tomábamos agua de lluvia”, aseguró. En su desesperación por ayudarla, su madre decidió a cruzar el río para pedir que la evacúen lo más pronto posible.
Una llamada telefónica puso en alerta a la tripulación del helicóptero militar que, sin descanso, había estado trasladando a zonas seguras a decenas de personas de las poblaciones inundadas en esa parte del país. La orden era rescatar a María Josefa que a sus 20 años estaba por convertirse en mamá por primera vez.
“Les pedimos que hagan señas para poder ubicarla, porque desde arriba no es fácil distinguirla”, comentó a Univision Noticias el comandante Edward Alburqueque de la Aviación del Ejército y piloto del helicóptero.
Pudo dar con ella por el humo negro proveniente de neumáticos quemados por la familia y amigos de la mujer y, después de buscar un buen lugar donde aterrizar en medio de los aniegos, procedió a la evacuación.
“Ella caminaba con dificultad, pero caminaba", recuerda el militar. "Se le veía muy adolorida pero con actitud fuerte, con ganas de salir de ahí”.
Después de 20 minutos de vuelo, María Josefa, que había permanecido sentada al lado de su madre que la acompañaba, ya no pudo más con los dolores y, ante el estupor de la tripulación, se tendió en el suelo de la aeronave.
“Me decían que respire, que ya llegábamos, que espere y me empezaron a atender, pero ya no podía, ya era hora. Parece que la bebe quería nacer ahí, en el helicóptero”, contó a Univision Noticias.
En ese momento fue una locura, recordó el comandante Alburqueque. “No eran las mejores condiciones para que nazca. Estaba al mismo tiempo emocionado, preocupado y una serie de sentimientos se mezclaron, porque era al mismo tiempo ver por el vuelo, la altura y como está la bebe, coordinar para que espere la ambulancia, preparar el aterrizaje para que sea lo más suave posible”, dijo.
Faltando 15 minutos para llegar a su destino, María Josefa dio a luz a una niña saludable de 3 kilos, a la que decidió llamar Cielo, para recordar dónde nació, y nombrar al piloto del helicóptero como su padrino.
“Estas cosas no se dan todos los días. Es una experiencia inolvidable, pero la emergencia aún continúa. Después de visitar a mi futura ahijada y comprobar que ella y su mamá están bien, tuve que salir nuevamente con el helicóptero a evacuar a otra mujer que estaba esperando gemelos de otro poblado aislado por las aguas”, afirmó el comandante.
El norte del Perú ha sido el más afectado por intensas lluvias que no se veían en dos décadas y que ha dejado más de un millón de afectados, a miles sin casas, carreteras y puentes destruidos.
@univision