Cada paso debe ser cuidadosamente pensado, calculado, evaluado, analizado, reflexionado, reevisado, tomar decisiones calmado, en frío, en paz, con paciencia, sin presión ni manipulación, que no juegue ningun papel tu nivel económico ni social al momento de tú reacción, que la agresividad brille por su ausencia, que estén fuera de tu vida el ego, la prepotencia, la arrogancia, la petulancia, la emoción, el fanatismo, la soberbia, el carácter volátil, hay que escuchar el alma, el espíritu y hacer uso de la energía positiva, estar en sí, consciente y equilibrado, que la inteligencia vuele y actúe en su máxima sabiduría, dejar atrás las diferencias, el odio, el rencor, pensar en la grandeza y el ejemplo de DIOS que perdonó a sus verdugos y traidores, valorar la familia, los amigos y la patria al tomar decisiones relevantes, tiene que estar por encima de todo tú paz, tú salud mental y física, que no te agiten las malas compañías, oídos sordos a los malos consejos, recuerda que con el corazón acelerado y la cabeza caliente se cometen los más terribles errores y un pasado brillante puedes quedar enterrado.
