Su noviazgo se mantiene en cuarentena, respetando el estado de emergencia que decretó el gobierno, que conlleva un distanciamiento social y un toque de queda desde las 5:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana.
Rosalía y su pareja se han auxiliado de la tecnología. “Hablamos todos los días por mensajes de texto y en las noches nos llamamos o nos videollamamos para hablar sobre lo que hemos hecho en el día”, cuenta Rosalí. Ambos trabajan a remoto.
Los fines de semana buscan una película para verla “juntos”, él en su casa y ella en la suya. Durante el día, ven series y documentales y en las noches intercambian opiniones.
Sus horarios de trabajo, de actividades y de conversar han cambiado, pues a veces en la madrugada siguen despiertos trabajando, o simplemente viendo alguna película. Otras veces duran horas hablando en la madrugada, esperando tener sueño. “Al parecer es común el insomnio en el mundo en estos días, lo que más nos preocupa es volver al horario habitual cuando todo vuelva a la normalidad”, comenta.
Dividir el tiempo, un reto
Anderson Serrano percibe que la cuarentena ha impuesto nuevos retos en la relación con su novia.
Lidiar con el horario ha sido su principal desafío. “Yo soy noctámbulo y mi novia no, te imaginarás los constantes reclamos que surgían por nuestras diferencias de horarios”, expone Serrano, quien es ingeniero civil.
Dice que, aunque parezca difícil de creer, el dividir el tiempo entre estudios, series, libros y su novia no fue tarea fácil.
Finalmente, acordaron compartir opiniones de libros, películas y series, incluso “verlas juntos sin estar juntos”, de forma virtual.
Leen libros juntos
Adry Jiménez cuenta que, junto a su novio, optaron por llamarse todos los días para ver cómo está cada quien y cómo están manejando la situación en sus hogares, que en cada uno es diferente.
“Hacemos videollamadas, empezamos a leer un libro, y cada uno lee una página o un capítulo”, explica.
La pareja ha estado jugando online, generalmente parché, lo cual hacen mientras preparan las clases virtuales que recibe cada uno, pues ambos son estudiantes universitarios.
DISTANCIA
Se ven sin tocarse.
Luego de tres semanas de cuarentena, una joven abogada y su prometido decidieron verse un día a la semana, pero sin tocarse. “Mi novio ahora viene los sábados a casa en horas de la mañana, aunque se queda fuera de la casa y yo dentro”, agregó.
@listin