Ese hombre descansa en paz

Disparó aquel 30 de mayo… y no tuvo paz. Meses después, desde el Palacio Nacional, disparó contra el 14 de Junio…y no tuvo paz. En 1963 disparó contra el gobierno Constitucional de Bosch…y no tuvo paz. Dos años después disparó más, ahora contra la Revolución Constitucionalista…y no tuvo paz. Siguió disparando como jefe de un “gobierno” títere del yanqui invasor (incluyendo una “operación limpieza” que costó la vida a cientos de patriotas)…y no tuvo paz. Y ahora, 55 años después de aquel primer disparo, la muerte le disparó a él…Y, por fin, Imbert Barrera tiene paz.