De acuerdo con los registros del Sistema de Migración de pasajeros salidos del Aeropuerto Internacional Las Américas, el día 12 de octubre, presuntamente un día después del crimen, Argenis tomó un vuelo hacia Miami, Estados Unidos.
Hoy se cumplen dos semanas de ello y otros tres acusados de estar implicados en el caso cumplen prisión preventiva de un año: el exdirector de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA) Manuel Rivas; el director financiero de la entidad, Faustino Rosario Díaz; y José Antonio Mercado Blanco (El Grande).
La fiscal Olga Diná Llaverías solicitó la imposición de un año de prisión preventiva para Contreras, contra quien se colocó una orden de captura ante la Policía Internacional (Interpol), la cual será conocida tan pronto este sea apresado.
El prófugo fue identificado como una persona agresiva, que siempre portaba armas de fuego y que no “barajaba un pleito”. Así consta en la declaración que dio Nelson Mejía Lantigua, gerente administrativo de la OMSA, a las autoridades del Ministerio Público y la Policía Nacional.
Argenis Contreras ha exhibido una vida de “alto nivel económico” en sus redes sociales, pero hasta hace unas semanas era una persona desconocida.
Según explicó el Ministerio Público, Contreras fue el brazo ejecutor contra el abogado y profesor universitario Yuniol Ramírez. Los particulares lo señalan como el “brazo derecho” de Manuel Rivas, en la Dirección General de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA), y como jefe operativo tanto de sus actividades administrativas como políticas.
Han pasado dos semanas desde que se encontró el cádaver del abogado y profesor unviersitario, y de que Argenis Contreras saliera del país, sin que hasta el momento se conozca de su paradero.
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